Aparte de crecer entre las mujeres latinoamericanas, la epidemia sigue aumentando en los siguientes grupos: transexuales, adictos a drogas inyectables, huérfanos y niños vulnerables, hombres homosexuales y personas que ejercen la prostitución.
El incremento de esta epidemia entre las mujeres se debe, sobre todo, a que son víctimas de relaciones desiguales con los hombres, quienes terminan imponiendo que el acto sexual se lleve a cabo sin protección.
La directora de la división latinoamericana y caribeña de Alianza Internacional Contra el Sida, Ana María Bejar, indicó que esta enfermedad es un "asunto complejo en una región compleja" y que las personas infectadas sufren estigma y discriminación. Bejar hizo un llamamiento a los gobiernos para que incluyan a todos estos grupos en sus políticas sanitarias y dijo que los precios de los tratamientos médicos continúan siendo elevados.
Passarelli, que explicó las claves del éxito del programa brasileño contra el virus ?información, implicación de todos los agentes sociales, incluido el Gobierno, respuesta temprana a la enfermedad y producción local de tratamientos?, destacó la voluntad de Brasil de colaborar con otros países en vías en desarrollo.
Este país ha conseguido desde 1996 que aumente la prevención y el uso del preservativo, que se estabilice la prevalencia de la enfermedad, que ésta disminuya entre hombres homosexuales y adictos a las drogas, que se reduzca la mortalidad y que haya un acceso universal a los tratamientos antirretrovirales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario