El Grupo para el Estudio de la Violencia de Género en España ha analizado los datos de una encuesta realizada a 11.475 mujeres de 18 a 70 años que acudieron a 547 centros españoles de atención primaria durante 2006 y 2007.
Los resultados, publicados en la revista médica Gaceta Sanitaria, no dan lugar a dudas: el 24,8% de las mujeres afirma haber sufrido malos tratos por parte de sus parejas hombres alguna vez en la vida, el 15,1% durante el último año.
“La edad media de comienzo de los malos tratos por el compañero íntimo se sitúa en España a los 25 años, con una duración media de siete”, explica a SINC Isabel Ruiz Pérez, coordinadora del estudio e investigadora de la Escuela Andaluza de Salud Pública.
“Mientras que en Castilla-La Mancha la violencia doméstica se prolonga de media hasta los 13 años, en Murcia y Navarra la duración aproximada es de 4 años”, detalla la investigadora.
En cuanto a la violencia fuera de la pareja, el estudio muestra que el 15,2% de las mujeres encuestadas afirmó haberla sufrido alguna vez en la vida, siendo los malos tratos recibidos por un familiar los más prevalentes (8%). Casi el 70% de las agresiones de familiares fueron cometidas por hombres.
Grandes diferencias autonómicas
“La violencia por un compañero íntimo muestra una variabilidad entre las comunidades autónomas, que debería abordarse en un futuro con mayor profundidad”, comenta Ruiz Pérez. “Quizá sea necesario abordar mejor esas diferencias o valorar si las estrategias de formación y sensibilización están realmente encaminadas a la mejora de las habilidades para detectar la violencia psicológica”, puntualiza la experta.
Las prevalencias de violencia por un compañero íntimo recogidas en este estudio muestran un rango entre comunidades del 10,7% al 28,6% para el último año, del 9,6% al 23,9% para la violencia previa, y del 18% al 40,2% para la violencia alguna vez en la vida. “Estas cifras están en consonancia con lo que se recoge en estudios realizados en España y otros países”, apunta Ruiz Pérez.
Por comunidades autónomas, las prevalencias más altas de violencia por un compañero íntimo se recogieron en Ceuta y Melilla (40,2%) y las Islas Baleares (32,5%), y la más baja en Cantabria (18%). Fuera de la pareja, son de nuevo Ceuta, Melilla y las Islas Baleares donde se recogieron las prevalencias de violencia más elevadas, mientras que la más baja se dio en Cantabria.
El impacto de las denuncias
Estudios previos han mostrado que en España no hay relación entre la tasa de denuncias y la mortalidad por violencia por un compañero íntimo entre las comunidades. Según los investigadores, “éste parece ser el primer trabajo que analiza si la prevalencia de violencia por un compañero íntimo está relacionada con las denuncias y muertes por esta causa”.
El trabajo demuestra que las comunidades con mayor prevalencia de malos tratos por el compañero íntimo presentan también las mayores tasas de denuncias por este motivo. “Aunque esta relación no es muy grande, podría suponer que efectivamente está calando el mensaje de que es indispensable denunciar para hacer frente a este problema”.
Desmontar el discurso de la ‘simetría de géneros’
Este trabajo analiza variables como la duración, la frecuencia y la gravedad del maltrato, lo que para los expertos es clave para contrarrestar el discurso de ‘la simetría de géneros’, que argumenta que los varones sufren en igual medida violencia por parte de las mujeres.
“Esto es obviamente cierto”, sostienen los autores, “pero la magnitud del fenómeno de la violencia contra las mujeres (medida por la prevalencia, pero sobre todo y principalmente por la duración y la intensidad de la violencia) es diferente a la de los varones, siendo ellas quienes sufren un maltrato de mayor magnitud y por lo tanto con mayores consecuencias para la salud”.
La violencia no entiende de edad
Otro estudio, publicado recientemente en la revista Psicothema, ha determinado la prevalencia y los factores de riesgo asociados a la violencia en una muestra de 1043 estudiantes universitarias españolas, con una media de edad de 22,2 años. El hallazgo más importante es que, mientras que la prevalencia de violencia fue del 7,1% el año anterior, en el momento de la investigación este dato aumentó más del doble, llegando al 15,2%.
En el 41,5% de esos casos el maltratador había sido la pareja, en el 50,9% algún otro hombre y en el 7,6% ambas fuentes. Los factores de riesgo identificados fueron tener más de 19 años, ingresos familiares anuales superiores a 18.000 €, nivel cultural medio de la familia, residencia familiar urbana y presenciar malos tratos en la infancia o adolescencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario