lunes, 1 de junio de 2009

Tratamientos de fertilidad

En pleno debate sobre embarazos no deseados, con telón de fondo sobre «la píldora del día de después» y con una Ley del Aborto muy polémica, SALUS LP ha querido asomarse al otro lado del problema, a aquellas personas que pese a querer tener hijos no pueden. Es la infertilidad el nombre que usan médicos y sociólogos para esta situación de imposibilidad de concebir un niño de forma natural o de llevar un embarazo a término tras un año de vida sexual activa, según señalan los especialistas.
Frente al testimonio personalizado creemos mejor mantener el anonimato de quienes están en proceso de estudio para resolver esa situación, que hoy, con la conjunción de las técnicas que manejan los especialistas es perfectamente solucionable con un considerable número de éxitos. La infertilidad afecta a un 15% de las parejas, según el llamado Consejo Internacional de Difusión de Información sobre Infertilidad. Es frecuente adjudicar una carga de culpabilidad a uno u otro miembro de la pareja, pero hay que señalar que «los culpables» están porcentualmente repartidos y que además hay causas desconocidas.
La sanidad pública orienta, trata y resuelve estos problemas en el seno de Unidades de Reproducción Asistida (es así como se llaman) pero también hay parejas que consideran mejor acudir en privado a resolverlos, como en otros asuntos relacionados con la salud.
SALUS LP ha decidido entrevistar al doctor Miguel Dolz Arroyo, que combina ambas áreas como especialista en Obstetricia y Ginecología desde hace unos años.
- ¿Qué es la esterilidad?
- Una pareja es estéril cuándo tras un año de mantener relaciones sexuales sin protección no consigue quedarse embarazada. Este tiempo lo reducimos a seis meses en aquellas parejas en la que la mujer tiene más de 38 años.
- ¿Cuál es la causa?
- Hoy en día, al varón es responsable del 40% de las veces y la mujer del otro 40%. En el 20% restante la causa no se conoce y se denomina esterilidad de origen desconocido. Dos factores influyen de una manera muy importante en la sociedad actual. Por un lado, la edad avanzada de la mujer, ocasionada por razones sociales, laborales y económicas, que retrasan el deseo de ser padres a edades cercanas a los 40 años. La disminución de la calidad del semen en los países desarrollados es un hecho constatado y relacionado con cambios en el estilo de vida y la contaminación ambiental.
- ¿Cómo se diagnostica esa realidad?
- Las pruebas que debe realizar una pareja estéril para conocer su problema son básicamente tres. La primera es realizar un análisis de semen al varón que, en el caso de salir alterado, se debería repetir a las dos semanas. En segundo lugar, comprobar cuál es la reserva ovárica, pues de ella depende el pronóstico reproductivo. Esto se conoce de forma indirecta mediante una determinación hormonal (FSH u hormona antimulleriana) o mejor mediante la realización de una ecografía transvaginal contando los folículos antrales en ambos ovarios. Y, por último y en tercer lugar, hay que comprobar que las trompas de Falopio son permeables y que permiten el encuentro del ovulo y el espermatozoide bien con una histerosalpingografía o laparoscopia.
- ¿Qué métodos existen para resolver la situación?
- Una vez hemos diagnosticado el problema que presenta una pareja, hemos de elegir el mejor tratamiento que le podamos ofrecer individualizando cada caso concreto, cada pareja, cada mujer. Básicamente, disponemos de tres soluciones para las parejas con problemas de esterilidad: la inseminación artificial, la fecundación in vitro y la donación de ovocitos. Con ellas, hoy en día, podemos conseguir que casi el 100% de las parejas puedan tener hijos.
- Esos métodos suelen ser desconocidos, en la mayoría de los casos. ¿Cómo se desarrollan?
- La inseminación artificial es la técnica más sencilla. Está reservada a aquellas parejas jóvenes y de buen pronóstico que tienen una calidad seminal normal y las trompas de Falopio permeables. Consiste en la introducción del semen «capacitado» (un proceso de selección de los mejores espermatozoides) con una cánula en el interior del útero a una mujer que previamente hemos estimulado la ovulación. La tasa de embarazo con esta técnica alcanza el 15%, con un porcentaje que llegaría al 60% de las parejas que realizan cuatro intentos. La fecundación in vitro (FIV) es una técnica algo más compleja; se realiza una estimulación ovárica tras la cual se procede a la extracción de los óvulos de la paciente y la fecundación de los mismos en el laboratorio con el semen de la pareja. Existen dos formas de fecundar los óvulos en el laboratorio: la fecundación in vitro clásica, que consiste en la inseminación de cada uno de los óvulos extraídos con una concentración aproximada de 20.000 espermatozoides con buena movilidad; y la inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI), que está reservada para aquellos casos en los que la mala calidad del semen no permite realizar una FIV clásica. Consiste en introducir un espermatozoide directamente en el interior del óvulo facilitando de esa forma la fecundación del mismo. Al día siguiente de la inseminación se verán cuantos óvulos están fecundados y, dos días después, se seleccionarán los dos mejores embriones que se introducirán en el útero. El éxito de la FIV alcanza el 45% por ciclo.
- Llama la atención el Diagnóstico Genético Preimplantacional. ¿En qué consiste?
- Es una técnica compleja que tiene como objetivo evitar la transmisión de enfermedades genéticas graves. Consiste en realizar un procedimiento de fecundación in vitro y poder determinar los embriones que no padecen una determinada enfermedad hereditaria como la fibrosis quística, distrofias musculares, hemofilia, etcétera, evitando de esa manera la transmisión de esa enfermedad grave a los hijos. El proceso consiste en realizar un orificio a la membrana que recubre al embrión mediante láser o un ácido especial en el tercer día de su desarrollo. A través del orificio se extrae una o dos células (biopsia embrionaria), en las que se localizará la presencia o ausencia de la enfermedad. A las 12 o 24 horas dispondremos del resultado del análisis de los embriones, momento en el que se seleccionarán aquellos embriones que no tengan la alteración genética para introducirlos en el interior del útero.
- ¿No están garantizados esos servicios por la sanidad pública?
- En los últimos años se ha producido un incremento del número de parejas estériles. Eso hace que en España haya un incremento en la demanda de ese tipo de asistencia sanitaria. La sanidad pública, aunque también oferta estos tratamientos, es insuficiente para poder dar cobertura a todas estas parejas y como resultado existen largas listas de espera que van de uno a tres años en el peor de los casos.
- ¿Qué razones le han llevado a fundar un centro de reproducción asistida?
- IV Valencia es un centro de reproducción asistida que está dotado de la más moderna tecnología, y que ofrece estos tratamientos en el contexto de la excelencia profesional y la calidad total. Los pilares básicos son la eficacia de nuestros tratamientos, la personalización de cada pareja y la individualización de cada tratamiento, pero siempre rodeado de un trato cercano, sincero y respetuoso.
- Disponen de un programa de donación de ovocitos.
- La donación de ovocitos es un procedimiento en el cual mujeres jóvenes y sanas de forma anónima y altruista, donan sus óvulos a aquellas mujeres que por sus circunstancias personales no tienen óvulos o están presentes en escaso número. Las indicaciones más importantes de este programa son la menopausia precoz, anomalías genéticas o hereditarias, mala calidad de los óvulos, fallos repetidos de fecundación in vitro y escasa respuesta a los tratamientos de estimulación ovárica. Estos tratamientos requieren un estudio minucioso de las donantes a las cuales se les realiza una historia clínica minuciosa, un estudio completo de análisis de sangre y estudio psicológico. Un programa de donación de óvulos requiere además control exhaustivo de los tratamientos que conllevan una dificultad especial, que es sincronizar el momento de la donación de los óvulos por parte de la donante y la recepción de los mismos por parte de la mujer receptora. Esta técnica es muy efectiva y los resultados obtenidos están alrededor del 60% y 70% por ciclo de donación.
- También disponen de un banco de semen.
- El banco de semen es un almacenamiento de muestras de seminales que provienen de donantes anónimos y altruistas que tras un riguroso estudio se seleccionan para poder ayudar a aquellas parejas que tienen que recurrir a este sistema como única opción. También se almacenan muestras de semen de los propios pacientes, consideradas como «sémenes valiosos» que provienen de varones sometidos a biopsias de testículo e incluso pacientes que antes de someterse a quimioterapia por cáncer deciden congelar su semen para poder tener descendencia. Las muestras se almacenan en recipientes criogénicos a 196 grados bajo cero. La organización de banco de semen se hace en función de las características fenotípicas (grupo y RH, estatura, color de cabello, tipo, color de ojos, etcétera).

No hay comentarios: